No voy a hablar de resultados. Voy a dar algunos por encima, pero no voy a profundizar. Simplemente voy a poner de manifiesto algo que a estas alturas todos saben y es que la WWE, el pasado 28 de octubre, hizo historia.
Las mujeres de la WWE hicieron historia.
Porque por primera vez la compañía realizaba un evento enteramente femenino, poniendo de manifiesto el hecho de que la división femenina ya no es sólo un adorno.

Han hecho falta muchos años y mucho trabajo para eso. Grandes mujeres, bellas y fuertes marcando el camino. Un camino que antes era estrictamente masculino.
Da igual si Becky Lynch derrotó a Charlotte Flair; si Nikki Bella no pudo con Ronda Rousey; si la batalla real, aparte de darle a Nia Jax la oportunidad de luchar por el título, congregó a grandes de hoy y de ayer; da igual si volvimos a ver en acción a Lita, a Trish Stratus… Lo verdaderamente importante es que todas ellas lo hicieron posible. Cuánto queda hasta que las chicas sean, por fin, main event en WrestleMania? Muy poco, seguro.
A todas, muchas gracias.
