El culebrón Paige/ El Patrón ha escrito otro capítulo, porque, siguiendo con el refranero, “a la tercera va la vencida”. ¿Es eso lo que está buscando Paige? ¿Qué la WWE la despida a costa de violar y violar la política de bienestar de la empresa? La británica acaba de ser suspendida una segunda vez, ésta por sesenta días por lo mismo y a la tercera… a la calle. ¿Es lo que está buscando?
Lo primero que quiero decir antes de entrar en faena es que esto es una opinión personal. Por eso está en la sección de opinión. Y también tengo que decir que, en mi opinión, Alberto del Río, perdón, ahora Alberto El Patrón, actual novio de Paige, es uno de mis luchadores favoritos. Me gusta muchísimo desde hace años. Pero eso no quita para que crea que en este asunto en concreto la ha fastidiado, desde el punto de vista profesional.
Pero el “la ha fastidiado” del Patrón es relativo. La que parece estar fastidiándola a base de bien es ella, Paige. Porque al fin y al cabo Alberto ya lo ha logrado todo en su carrera, está cerca de los cuarenta años, y le queda poco recorrido (dos años ha calculado él mismo). No es el caso de ella que, con 24 años, todavía podría decirse que lo tiene todo por delante. Pero Paige –Saraya-Jade Bevis- y Alberto se han enamorado y parece ser que mucho, con lo que me contradigo a mi misma que no creía para nada en esa relación. Se han enamorado y presumiblemente están todavía en ese modo de atracción física bestial que les induce a hacer cosas no muy razonables.
Por ejemplo, forzar un despido, en el caso de ella. Es una opinión, repito. O en caso del Patrón, por ejemplo, cancelar algunos compromisos bajo el escudo del ambiguo “compromiso previo”, o por sufrir un incidente, que tiene diferentes versiones: desde el ataque con cuchillos hasta el ataque de un indigente ebrio, que le provocó varios cortes profundos pero del que no queda señal alguna el esta fotografía publicada en el perfil de Instagram de Paige dos dias después de la supuesta agresión:
Que, por cierto, el incidente se parece mucho al que Jimmy Noble sufría unos días antes que el del El Patrón. Y no quiero ser malvada, pero es que me sale…
El caso, que creo que se les está yendo de las manos a los dos y me pregunto si en el futuro les merecerá la pena. Posiblemente Alberto salga más beneficiado de esta relación que la inglesa. A lo mejor Paige está tirando su carrera por la borda.
Pero tampoco son los primeros, ni serán los últimos, que lo hacen.